Crónica de un día inolvidable. Terruño del Sol.

Cuando  en mayo de este año íbamos terminando nuestro Retiro, nos planteamos en el plenario por qué nos costaba tanto lograr la interioridad y el silencio en esos días de recogimiento espiritual.

Hubo quienes dijeron que eso respondía a la necesidad de generar o acentuar vínculos ya que incluso algunos no se habían visto durante el año; en ese intercambio de opiniones surgió la idea que debiera existir un espacio dedicado sólo y exclusivamente a vincularse.

La idea prendió de inmediato y ese mismo día, en el almuerzo, el Consejo regional  fijó  la fecha del sábado 11 de Agosto para llevar a cabo tal jornada en el Santuario.

Rodolfo y Mary Dhuin quedaron encargados de toda la organización, ellos siempre “están”, aunque deban multiplicar sus esfuerzos;.a veces  creemos en la Región que Rodolfo y Mary poseen el don de la bilocación.

Los Dhuin no dejaron detalle sin atender: hasta hicieron imprimir tarjetas de invitación y motivación que llegaron a manos de cada federado, repartidas en forma personal a cada familia, incluyendo en la invitación  tanto a hijos como a nietos de los federados

La jornada arrancó con lo que en nuestra Región ya es costumbre: la Adoración al Santísimo. A propósito, queremos contar que la Fede del Terruño ha tomado a su cargo la Adoración en el Santuario todos los sábados, de 11:00 a  12:00. De esta manera,  dedicamos esa hora a vincularnos con Jesús, lo que ya preparó un cálido ambiente fraterno, muy familiar. La Adoración fue preparada por Guillermo y Marcela Soria .,otros que siempre se multiplican. Durante la Adoración todas las banderas de los Cursos estuvieron junto al altar.

Como nuestro Santuario queda arriba de un cerro, al terminar la Adoración bajamos todos caminando, con las banderas  en alto mientras cantábamos, hasta que llegamos al salón Juan Pablo II –ubicado al pie del cerro- donde hicimos el Encuentro

Una vez en el salón, nos sentamos en semicírculo frente al cuadro de la MTA y, con la animación de Rubén Bertinatto, cada Curso pasó al frente con su bandera, presentó sus integrantes  y explicó su Ideal de Curso, contó brevemente su historia y algunos hasta cantaron su canción.  También estaban presentes nuestros federados que ya volvieron a la Casa del Padre; María Elena Griffouliere, Angelita Reitano y Coco Ricciardi. Frente a sus fotos,  Mary y Osvaldo Banille con muy emotivas palabras nos brindaron una semblanza de los tres.

Muchos matrimonios fueron con sus hijos y algunos hasta con sus nietos. Fue especialmente emotivo y gratificante compartir el almuerzo con hijos de federados de 15, 20, 30 y hasta más de 40 años.  Algunos de ellos son también federados, pero muchos otros no y fueron a compartir ese día con nosotros. Esto fue un regalo especial de La Mater, que quedará para siempre en nuestra memoria y en la historia de la Región.

A cada Curso se le entregó un distintivo de color. Era clara la consigna: no podía haber dos colores iguales sentados juntos  a la mesa. Con esto quedaba asegurada la “mezcla” entre los integrantes de los diferentes Cursos y la posibilidad de  profundizar los vínculos. . Comimos un asado espectacular, preparado por Rody Dhuin y sus amigos. Algunos tuvieron que despedirse al finalizar el almuerzo pero muchos otros nos quedamos y, aprovechando  la espléndida tarde, nos sentamos en el jardín al calor del sol mientras  tomábamos mate o café y conversábamos.

Terminamos post-gustando  el encuentro -gracias a Mary Dhuin y Rubén Reitano- que  contaron anécdotas y pormenores sobre la construcción de nuestro Santuario. Nos dimos cuenta entonces de las joyas que tenemos en nuestra familia: gente trabajadora, entregada con fidelidad a una causa y por sobre todo muy humildes.  Si no hubiésemos preguntado, nunca nos hubiéramos enteramos de todo lo que hicieron y cuánto les debemos; es una generación de schoenstattianos que dieron todo gratuita y desinteresadamente por Nuestra Madre y para que muchos pudiéramos recibir las gracias que Ella nos regala.

Así transcurrió la tarde. No queríamos irnos… ¡¡¡Y el acontecimiento que por primera vez vivimos en la Fede del Terruño quedó nomás institucionalizado!!!  Nos parece que ya no será necesaria una decisión especial para esto

Un agradecimiento muy especial para los hermanos federados que se hicieron presentes  viniendo desde San Juan y San Rafael con el esfuerzo que esto significa y también a los Jefes Territoriales que una vez más, como verdaderos padres, nos acompañaron con sus oraciones y enviaron un saludo para el encuentro, encuentro que nos dejó tanta alegría en el corazón que se constituyó en un día inolvidable.

 

                                                                     Silvia y Alberto Zabala.

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